CONTRA MI VOLUNTAD

“CONTRA MI VOLUNTAD”

 

La trata de personas es un tema que se ha dado a conocer pero no lo suficiente, tanto que hasta puede haber personas que ni informadas están del significado de este concepto, aunque existen películas que muestran un ejemplo de ello como se menciona anteriormente hay gente que no tiene acceso a específicos medios de comunicación.

Por trata de personas se puede definir que es la captación, el transporte, el traslado, la acogida o recepción de personas; los que realizan este tipo de negocios recurren al uso de fuerza, al rapto, al fraude, al engaño y abuso de poder. Con fines de explotación Sexual, por lo general la comunidad más afectada son las Mujeres.

Los tratantes o traficantes de personas son vulgarmente llamados “Padrotes” quienes se encargan de distintas formas de enganchar a sus víctimas.

Existen tres componentes fundamentales que están estrechamente vinculados entre si la actividad (o enganche), los medios (o la forma en que se engancha) y el propósito (o fin).

Aproximadamente 80,000 personas son traficadas anualmente atraves de las fronteras nacionales sin incluir a los millones de víctimas mas que existen dentro de los países. Esto es un comercio ilegal que mueve más de 32,000 millones de dólares por año en el mundo. Esto y más son los delitos cometidos con las victimas de trata.

Hay que tomar en  cuenta que la forma en la que trabajan es tan sutil y organizada que no pueden escapar de sus opresores. En la mayoría de los casos dados con jovencitas de apenas 13 años han usado la estrategia del secuestro o rapto, llevándoselas con engaño; por otra parte no podemos imaginar el grave daño que ocasionan a los familiares, la angustia y dolor de no saber donde y que les habrá pasad; como se menciona las redes de trata trabajan con niñas de apenas de 13 años hasta jovencitas de 19, 20; todas engañadas y explotadas para trabajar en la prostitución. ¡No nos hemos dado cuenta que las victimas piden ayuda a gritos! ¿Qué podemos hacer si también somos seres humanos como ellos? Además son redes enormes bien organizadas entre si para hacer daño de una manera tan perfecta e ilegal pero lo único que queda es denunciar si se sabe de algún caso porque si no nos convertimos en cómplices de este delito. Ante esta problemática a la que nos enfrentamos conocidas también como “La esclavitud del siglo XXI” podemos identificar algunas pistas para evitar caer en ello. Primeramente estar siempre alertas a todo lo que sucede en nuestro alrededor, dado que la mayoría de los casos se dean en jóvenes porque como sabemos van en busca de mejores oportunidades y para ello recurren a conseguir trabajo pues es aquí donde se enciende una Luz Roja: Muchas veces encontramos anuncios de “Se solicita”. . . cuando el anuncio mencione un empleo fácil de desempeñar durante pocas horas y con muy buen sueldo, es mejor evitarlo ya que puede ser un medio para engancharte en una Red de trata, en otras ocasiones para poder ingresar a un trabajo piden los papeles antes de darte el trabajo nadamas para investigar datos e incluso una cuota para estar seguro de obtener el trabajo. Por eso es importante estar muy bien informados sobre esto y difundir más el tema.

NO SOY PERFECTA PERO AMO A DIOS CON TODO MI CORAZON.




¡¡NO SOY PERFECTA!!

Soy imperfecta en mis razonamientos, porque sólo entiendo lo que me conviene, y a veces pienso que la razón me pertenece.
Soy imperfecta en la comunicación; porque creo que sólo lo mío es importante, cuando hay tanto que escuchar.

 Soy imperfecta en el amor; porque sólo amo a los que me gustan, cuando debería amar a todos.

Soy imperfecta en mi manera de ver; porque sólo le presto atención a lo que para mí es bello, aún sabiendo que todo tiene su lado hermoso.
Soy imperfecta en mi manera de creer; porque creo lo que me interesa, y no sé esperar confiadamente.

Soy imperfecta en mi madurez; porque me aferro sólo a lo que tengo y conozco, aún sabiendo que desprendiéndome de esas cosas, será más fácil caminar hacia la grandeza.

Soy imperfecta a la hora de bendecir al prójimo; porque me avergüenza que sepan que tengo fe, aún sabiendo que cada vez que lo hago, sea de la forma que sea, mi corazón se llena de gozo y de vida.
Señor, ayúdame a superar mi imperfección y tú amigo, trátame como a un igual.

No me catalogues, no soy un objeto.
No me etiquetes, no soy mercadería.
No me juzgues, no soy tu acusado.
No me acuses, no eres mi fiscal.
No me condenes, no eres mi juez.
No me enmarques, no soy un espejo ni un cuadro.
No me definas, soy un misterio.
No me minimices, soy más complejo de lo que crees.
No me divulgues, no soy un producto o una cosa.
No me vulgarices, soy alguien muy especial.
No me apuntes, no soy un blanco de tiro.
No me idolatres, no soy un ídolo.
No me calumnies, tengo el derecho a la verdad.
No me difames, tengo el derecho de ser quien soy.
No me encierres en esquemas, soy más libre de lo que te imaginas.
No creas demasiado en mí, soy falible.
No dudes siempre de mí, soy más verdad que error.
Recuerda siempre que:
Soy una persona como tú.
Soy humano como tú.
Soy limitado como tú.
Soy hijo de Dios como lo eres tú.

“Señor, yo no quiero esta discapacidad en mí, quiero ver con tus ojos”